El plástico es uno de los mayores problemas a nivel global. Cualquier tipo del mismo es uno de los principales causantes de contaminación oceánica. El problema ha escalado tanto, que muchos proyectos se han presentado en distintos países y ONGs internacionales para removerlo.
Pero, así y todo, removerlo no es la solución. Eso sería como seguir ensuciando y limpiando de vez en cuando, pero cada vez con menos eficiencia.
Recientemente, investiadores de la Universidad de Tel Aviv, en Israel, han desarrollado un polímero fabricado a partir de microorganismos marinos, que podría llegar a reemplazar en un futuro a medio plazo al plástico convencional.
Según se detalla en la revista Bioresource Technology (en donde fue publicado), el nuevo material no requeriría petróleo para su fabricación, lo que significa una generación de desechos no tóxicos y totalmente reciclables en desperdicios orgánicos.
El nuevo y llamativo elemento se llama polihidroxialcanoato (PHA) y es producto de un proceso de cultivo en el mar, cuando microorganismos se alimentaban de algas.
Si bien ya existían procesos parecidos antes, es la primera vez que existe la posibilidad de masificarlo. Esto se debe a que el PHA no requiere de tierra y agua dulce - como sí lo hacen otros procesos - y permitiría a países con escasez de agua dulce producirlo. Gran idea, si se tiene en cuenta que países con gran población e industria como China e India tienen problemas con el agua.
El desarrollo completo aún no esta terminado, debido a que aún hace falta seleccionar las mejores algas y microorganismos, pero se espera una pronta aplicación en la industria a mediano plazo.